Si quieres lucir siempre elegante, en tus zapatos está uno de los mayores cuidados. De poco sirve que hayas comprado unos buenos zapatos si al mes parecen que tienen más de 3 años de uso.

Todo zapato formal generalmente es de piel y ésta de alguna manera puede considerarse, de manera simbólica, con vida propia. Cada vez que al final de tu jornada de trabajo te quitas los zapatos la piel con la que están confeccionados «descansa» y se enfría con la temperatura ambiental. Es por esta razón que en la zona del empeine del zapato comienzan a aparecer esas grietas que eliminan toda elegancia y pulcritud.

La solución es muy sencilla y, de hecho, se convierte en una regla de estilo del hombre elegante que sabe que toda su ropa es una inversión a largo plazo en sí mismo.

«Por cada par de zapatos de piel que tengas en tu armario deberás de comprar un par de hormas de madera (de preferencia de cedro) con las cuales tu calzado se mantendrá en óptimas condiciones evitando las horribles grietas y que parezca que fue atropellado por un automóvil.»

Si quieres aumentar la vida útil de tus zapatos 3 veces más, entonces te consejo que cada vez que adquieras un par de zapatos nuevos también incluyas un par de hormas de madera, no de plástico, que además de mantenerlos en perfecto estado, absorberán los olores de la transpiración del pie.

Mientras más cuides tus zapatos mejor imagen proyectarás y parecerá que siempre vistes con zapatos de excelente calidad.

Nos leemos pronto.

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